La bioética, o del respeto

Hoy acompañé a alguien a una iglesia, pensé que era a una misa y la verdad me dio algo de tedio pensar que iba a escuchar a un cura recitar de memoria un ritual aburridor pero no. Se trató de una conferencia sobre el perdón, había poca gente, tal vez unas 30 personas, la mayoría señoras y algunos señores entrados en años, el cura también mayor.  Fue interesante, especialmente porque como ya dije acompañaba a alguien que me pidió el favor, y bueno, los favores son regalos que solo damos a gente cercana. Se trataba de una actividad dirigida a los feligreses de la parroquia, una actividad centrada en "el perdón".

El cura le metió bioética a su charla, un tema de esos complejos de los que solo los curas (en este caso un Jesuita, me pareció...) que entienden el mundo actual suelen abordar con desparpajo dado que los Jesuitas en general suelen ser más cultivados que la mayoría de los curas de púlpito que no entienden de que va la vida.

Contaba el cura que una señora enferma y desahuciada le pidió hablar con su familia para que entendieran que ella no se dejaría cortar las piernas. Le habían diagnosticado una enfermedad (no recuerdo el nombre) y si no le cortaban ambas piernas, solo viviría unos cuantos meses, cortándoselas podría durar diez años más. Ella decidió que no quería vivir sin piernas, ¡no se las haría amputar!

La señora le pidió al cura, experto en estos temas, que hablara con la familia; los hijos pusieron el grito en el cielo, mandaron al cura a la mierda con su bioética y todo y a la mamá la mandaron derecho al quirófano a que le amputaran las piernas.

Total, al cabo de dos o tres meses la mamá murió. No se sabe si por la tristeza de verse sin piernas o por la enfermedad como tal contó el cura y eso poco importa, total se murió, y rapidito. Pero los hijos se quedaron con el dolor de haber pasado por encima de la voluntad de su mamá. El derecho a decidir, de eso se trata la bioética, decía el cura. Cuenta el cura que tres de sus hijos se fueron muriendo por dentro carcomidos por el dolor... Interesante eso de la bioética.

Contó más cosas el cura, sobre el perdón y el respeto en cuanto a las decisiones de las personas sobre las que de alguna manera tenemos injerencia. Interesantes algunas.