¿Qué tanto puede demorarse una autorización para un TAC Gatillado o Tomografía de Tórax?
El pasado lunes 25 de noviembre mi papá ingresó a Urgencias de la Clínica Las Américas de Medellín tras haber sufrido un desmayo. Al día siguiente, martes, fue intervenido para ponerle un marcapasos.
La operación fue un éxito como era de esperarse ante un procedimiento rutinario realizado por uno de los integrantes autodenominado "mejor equipo médico de Colombia", tal como se lo dijo a mi mamá, sin el más mínimo asomo de vergüenza el propio Jefe de Cardiología de la Clínica Las Americas, Dr. Mauricio Duque, quien la interrumpió para no tener que escucharla sin respetar su edad y la preocupación que la embargaba (#UnPendejoMás que cree que el título lo hace respetable) diciéndole "señora, yo soy el mejor Cardiólogo de Colombia y mi equipo es el mejor", #juaz, mi mamá hastiada lo dejó ir sin preocuparse más por el singular pavo real.
Lo irónico de todo esto es que tenga que ser mi papá, Jaime Posada de Greiff, quien venga a darle una lección anti prepotencia a este tipo. Hay lecciones en la vida que no valen la pena, y es irónico porque siempre he pensado que la sangre que corre por las venas de este tipo de profesionales (?) hiede, ustedes saben a qué.
Bien, para no alargar el cuento, el pasado 16 de diciembre a la 1:00 a.m., mi papá tuvo un agudo dolor en el pecho "como si me apuñalaran" le dijo a mi mamá. Mi mamá lo llevó a urgencias de la Clínica de Las Américas donde le tomaron la presión y le hicieron un electrocardiograma, los resultados salieron bien, pero el dolor era un alerta que no se podía descartar. El cardiólogo, cuyo nombre desafortunadamente no recuerda mi madre, (tenemos bien guardado el electrocardiograma) dijo que era un dolor toráxico, que lo llevara a la Clínica Las Vegas o a al Hospital San Rafael de Itagüí porque el dolor no tenía un origen coronario, que no era grave (!), y bueno, era el concepto de un médico de urgencias de la Clínica Las Americas que tiene, ya nos lo habían dicho ellos, el mejor equipo médico de Colombia, ¡vaya, y cómo no creerles!
Con ese concepto y un poco más tranquila, mi mamá regresó con mi papá al apartamento. Al medio día del mismo 16 de diciembre mi papá le dijo a mi mamá que le seguía doliendo, y casi se le desmaya nuevamente, mi papá raras veces se queja, por no ponerle problema a nadie. Así que mi mamá lo llevó a Urgencias de la Clínicas Las Vegas, donde lo atendieron muy rápido, cerca de las 2:00 p.m., y decidieron, después de de hacerle varios exámenes, dejarlo hospitalizado en la Unidad de Cuidados Coronarios (!), tal vez con la misma información que tenían en la Clínica Las Américas, bueno, aunque fue en las Américas donde le pusieron el marcapasos. Y ahí la gran diferencia entre tener al mejor equipo de cardiólogos de Colombia, wow!, que cuenta con "el mejor Cardiólogo del país" como Jefe de Cardiología y tener a un equipo que poco de pavoneos y mucho de seriedad y trabajo, como el que tiene la Clínica Las Vegas donde le hicieron un cateterismo para revisar las vías coronarias y descartar alguna obstrucción. No había problema con las arterias, así que hicieron un ecocardiograma y encontraron que uno de los electrodos del marcapasos está incrustado en una de las paredes del corazón, con alguna probabilidad de que llegue a perforarlas lo que sería fatal, pero los médicos necesitan un nuevo examen más preciso para ver exactamente la ubicación y el grado de peligro real que esto que encontraron supone.
Mi papá necesita un TAC "Gatillado" y aunque en la Clínica Las Vegas están moviendo cielo y tierra para lograr que la Nueva EPS autoricen este examen, dicen que la época no ayuda mucho, que esto lo hacen después de que el consejo técnico médico de la Nueva EPS se reúna (esperamos que lo hayan hecho hoy lunes 23 de diciembre) para autorizar este tipo de solicitudes que deben ser miles. Hoy es 23 de diciembre, pero la salud de mi padre, ni la de ningún colombiano puede supeditarse a fechas especiales.
¡Señores Nueva EPS, ustedes dirán!
La operación fue un éxito como era de esperarse ante un procedimiento rutinario realizado por uno de los integrantes autodenominado "mejor equipo médico de Colombia", tal como se lo dijo a mi mamá, sin el más mínimo asomo de vergüenza el propio Jefe de Cardiología de la Clínica Las Americas, Dr. Mauricio Duque, quien la interrumpió para no tener que escucharla sin respetar su edad y la preocupación que la embargaba (#UnPendejoMás que cree que el título lo hace respetable) diciéndole "señora, yo soy el mejor Cardiólogo de Colombia y mi equipo es el mejor", #juaz, mi mamá hastiada lo dejó ir sin preocuparse más por el singular pavo real.
Lo irónico de todo esto es que tenga que ser mi papá, Jaime Posada de Greiff, quien venga a darle una lección anti prepotencia a este tipo. Hay lecciones en la vida que no valen la pena, y es irónico porque siempre he pensado que la sangre que corre por las venas de este tipo de profesionales (?) hiede, ustedes saben a qué.
Bien, para no alargar el cuento, el pasado 16 de diciembre a la 1:00 a.m., mi papá tuvo un agudo dolor en el pecho "como si me apuñalaran" le dijo a mi mamá. Mi mamá lo llevó a urgencias de la Clínica de Las Américas donde le tomaron la presión y le hicieron un electrocardiograma, los resultados salieron bien, pero el dolor era un alerta que no se podía descartar. El cardiólogo, cuyo nombre desafortunadamente no recuerda mi madre, (tenemos bien guardado el electrocardiograma) dijo que era un dolor toráxico, que lo llevara a la Clínica Las Vegas o a al Hospital San Rafael de Itagüí porque el dolor no tenía un origen coronario, que no era grave (!), y bueno, era el concepto de un médico de urgencias de la Clínica Las Americas que tiene, ya nos lo habían dicho ellos, el mejor equipo médico de Colombia, ¡vaya, y cómo no creerles!
Con ese concepto y un poco más tranquila, mi mamá regresó con mi papá al apartamento. Al medio día del mismo 16 de diciembre mi papá le dijo a mi mamá que le seguía doliendo, y casi se le desmaya nuevamente, mi papá raras veces se queja, por no ponerle problema a nadie. Así que mi mamá lo llevó a Urgencias de la Clínicas Las Vegas, donde lo atendieron muy rápido, cerca de las 2:00 p.m., y decidieron, después de de hacerle varios exámenes, dejarlo hospitalizado en la Unidad de Cuidados Coronarios (!), tal vez con la misma información que tenían en la Clínica Las Américas, bueno, aunque fue en las Américas donde le pusieron el marcapasos. Y ahí la gran diferencia entre tener al mejor equipo de cardiólogos de Colombia, wow!, que cuenta con "el mejor Cardiólogo del país" como Jefe de Cardiología y tener a un equipo que poco de pavoneos y mucho de seriedad y trabajo, como el que tiene la Clínica Las Vegas donde le hicieron un cateterismo para revisar las vías coronarias y descartar alguna obstrucción. No había problema con las arterias, así que hicieron un ecocardiograma y encontraron que uno de los electrodos del marcapasos está incrustado en una de las paredes del corazón, con alguna probabilidad de que llegue a perforarlas lo que sería fatal, pero los médicos necesitan un nuevo examen más preciso para ver exactamente la ubicación y el grado de peligro real que esto que encontraron supone.
Mi papá necesita un TAC "Gatillado" y aunque en la Clínica Las Vegas están moviendo cielo y tierra para lograr que la Nueva EPS autoricen este examen, dicen que la época no ayuda mucho, que esto lo hacen después de que el consejo técnico médico de la Nueva EPS se reúna (esperamos que lo hayan hecho hoy lunes 23 de diciembre) para autorizar este tipo de solicitudes que deben ser miles. Hoy es 23 de diciembre, pero la salud de mi padre, ni la de ningún colombiano puede supeditarse a fechas especiales.
¡Señores Nueva EPS, ustedes dirán!
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